martes, 16 de marzo de 2010

Europa como Potencia del mundo en el siglo XIV y XV

Nos encontramos en Europa durante los siglos XIV y XV, cuando se da inicio  la secularización dentro de los ámbitos políticos y religiosos; cuando se originan los países de potencia, los cuales influyen en todo el mundo (no sólo en lo político, sino ideológico, económico y religioso). 


En el mundo no existía una potencia, sino muchas potencias, pero ¿cómo Europa se convierte en potencia del mundo a partir del siglo XIV y XV? Europa no tenía poder para imponerse sobre otras civilizaciones, ni tampoco tenía algún elemento de poder como los Imperios en esa época. Europa no tenía rasgos de potencia, carecía de región fértil y populosa, era vulnerable a las invasiones, ni tenía un liderazgo central como los países de China y Turquía que eran las potencias económicas más importantes de esa época. 

China, en los siglos XIII y XIV, era un país que era conocido no sólo por su economía e Imperio, sino por su tecnología: la imprenta, la pólvora, sus barcos eran más tecnológicos que los Europeos en el siglo XV.


Pero surge un inesperado “milagro” para Europa. China y Turquía tenían poderes centralizados, que a la larga fue un estancamiento, porque impedía que se tomarán decisiones. Hay teorías de que Turquía y China no se expandieron más por el miedo de lo diferente, de la introducción de nuevas culturas, debido a esto Europa aprovecha sus deficiencias como “no-potencia” en ventajas convirtiéndose así en la potencia más grande de la época. ¿Pero cómo? Por no tener un liderazgo central, incentiva a la competencia entre las diferentes partes de Europa, no como los Imperios (China y Turquía) que al tener un líder central, se quedaron estancados. Por tener penínsulas y costas, esto va a propiciar al comercio y facilitar la navegación. 

Como Europa quería llevar su comercio a nivel mundial, va a desarrollar una de las cosas más importantes del momento: la expansión y creación de nuevas rutas de comercio. ¿Por qué se buscan nuevas rutas? Por un problema económico, estaba bloqueada la ruta de Oriente, y se solucionó con nuevas rutas transatlánticas. Los primeros países europeos que se adelantaron en iniciar la nuevas rutas fueron Portugal y España, porque tenían mejor preparación marítima que otros países.

Pero estas expediciones tuvieron otras causas y es que además de controlar el comercio con nuevas rutas, los países de España y Portugal vieron la oportunidad de expandir su territorio y el cristianismo (evangelización).

Estas rutas transatlánticas va a traer frutos, se va a iniciar una nueva economía mundial, va a comenzar el liderazgo ante otros Imperios, se va a occidentalizar el mundo y se van a expandir la religión (evangelizando a pueblos no cristianos).

 

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